La electricidad es la energía más común en nuestros días, lo cual también hace más probable que ocurra un accidente. Un riesgo eléctrico se define como la posibilidad de circulación de corriente eléctrica en el cuerpo, y su desventaja radica en su difícil detección por los sentidos, cuya reacción ocurre cuando ya se está sufriendo un daño.